jueves, julio 31, 2025

Tomas té de ruda el 1° de agosto?

 



JULIO LOS PREPARA Y AGOSTO SE LOS LLEVA
El reconocido dicho para "alejar el maleficio" se mantiene en el tiempo. Habitantes de los pueblos originarios lo dieron a conocer cuando decidieron enfrentarse a todo lo malo con sólo tomar cada mañana del 1° de agosto el té de ruda. Se trata de una bebida a la que los indígenas le atribuían un carácter de medicinal, y que fue adoptada por criollos que difundieron la tradición de la que hasta hoy se habla.

Lo más importante para los católicos es saber que todo lo que tiene que ver este tipo de prácticas, tienen carácter pecaminoso cuando se coloca la superstición por encima de la Providencia de Dios.

Se puede tomar el té de ruda como cualquier otro tipo de bebida que tenga carácter medicinal. Sin embargo, atribuirle un signo idólatra, pagano, o de magia, va en contra del primer mandamiento.

Recuerda que Dios es el HACEDOR de todas las cosas. La salud, buena o mala, también la permite el Señor, y tomar un te ancestral, proveniente de pueblos adoradores de demonios, para "pasar agosto" (como se dice en el norte argentino), sólo va a contribuir a hacerle una enorme ofensa a Nuestro Creador y pecar gravemente.






San Ignacio de Loyola, martir de la fe, 31 de Julio

 


San Ignacio de Loyola, nació en la provincia de el país Vasco y se crio en la corte de los reyes católicos inclinándose a los ejercicios de las armas. Habiendo los franceses puesto cerco al castillo de Pamplona, Ignacio lo defendió con heroico valor, hasta que fue malamente herido. Agravándosele el mal, se le apareció el apóstol san Pedro, del cual era muy devoto, y con esta visita del cielo comenzó a mejorar.

En la convalecencia pidió algún libro de caballería para entretenerse, y como le trajesen, en lugar de estos libros, uno de la Vida de Cristo y otro de Vidas de santos, se encendió en su lección de suerte que determinó a dejar el mundo.

Sano de sus heridas, se partió para Montserrat, donde hizo confesión general, y colgó su espada y daga junto al altar de nuestra Señora, y dando los vestidos preciosos a un pobre, se vistió de un saco asperísimo. De allí partió para Manresa, donde por espacio de un año hizo vida austerísima y penitente en el hospital de santa Lucía y en una cueva cerca del río; en la cual ilustrado por el Espíritu Santo y enseñado de la Virgen santísima, escribió aquel famoso libro de los Ejercicios espirituales, que ha hecho siempre increíble fruto en la Iglesia de Dios. Estudió en Barcelona, en Alcalá y Salamanca, donde padeció por Cristo persecuciones, cárceles y cadenas. Acabó sus estudios en París y ganó para Dios nueve mancebos de los más excelentes de aquella universidad, y con ellos echó en el Monte de los Mártires los primeros cimientos de la Compañía de Jesús. Ésta era un nuevo e invencible ejército que el Señor suscitaba para la propagación de la santa fe y defensa de la santa Iglesia combatida por los sectarios de esto tiempos, discípulos de Lutero e imitadores de la rebeldía de Lucifer. Y así, la Compañía de Jesús conquistó para Cristo muchos reinos de Asia, África y América, restauró en Europa la piedad cristiana y la frecuencia de sacramentos, y ha ilustrado la Iglesia con centenares de mártires, con millares, de nombres sapientísimos, y aun dando por ella la vida. Tal es el espíritu que infundió san Ignacio en su santa Compañía; el cual después de haberla gobernado por espacio de dieciséis años, a los sesenta y cinco de su edad descansó en la paz del Señor.

El papa Gregorio XV lo canonizó el 12 de marzo de 1622 junto con Francisco Javier, Felipe Neri, Teresa de Jesús e Isidro Labrador.

Reflexión: Si quieres alcanzar el espíritu de Jesucristo que informaba el alma de san Ignacio, lo hallarás en sus Ejercicios espirituales. Dice el pontífice León XIII, que, al conocerlos, no pudo menos de exclamar: “He aquí el alimento que deseaba para mi alma.” (Alocución de León XIII al clero de Carpineto).

Oración: Oh Dios que, para propagar la mayor gloria de tu nombre, diste un nuevo socorro a la Iglesia militante por medio del bienaventurado Ignacio, concédenos que, peleando con su ayuda y ejemplo en la tierra, merezcamos ser coronados con él en el cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

 



martes, julio 29, 2025

Santa Marta, 29 de Julio

 




Santa Marta es patrona de los imposibles, del hogar, de los cocineros, de las amas de casa, de los trabajadores domésticos, de las casas de huéspedes y hoteleros, y de los lavanderos.
Santa Marta, que siempre mostró su deseo de servir, es también ejemplo para todo cristiano que quiera cumplir sus deberes con diligencia y responsabilidad.

A Santa Marta recurren los fieles para pedir su protección y ayuda en medio de las urgencias y dificultades más grandes, pues fue ella quien conmovió a Jesús con su gran fe: "Señor, si hubieras estado aquí, no habría muerto mi hermano”, refiriéndose a Lázaro, que había fallecido solo unos días antes.

Reflexión: Muy bien pagó nuestro Señor Jesucristo los buenos servicios que recibió de su devotísima santa Marta; la instruyó en las cosas del Reino de Dios, resucitó a su hermano Lázaro, la hizo una grande santa, la amparó en los peligros del mar, la llenó de celo apostólico, la hizo fundadora del primer colegio de santas vírgenes, y la recibió, llena de méritos, en el palacio de su gloria.

Y nosotros ¿a qué pensamos servir sino a Jesucristo, porque los que sirven al mundo no sacan otra recompensa que funestos desengaños en la vida, angustias en la muerte y tormentos en la eternidad?

Oración: Oh Dios, salud y vida nuestra, dígnate oir nuestras súplicas, para que así como la fiesta de tu bienaventurada virgen santa Marta nos llena de espiritual alegría, así también nos alcance una piadosa devoción. Por JCNS. Amén






domingo, julio 27, 2025

Piedra Fundacional en Iglesia Sagrada Familia, Tucumán, Argentina, 27 de Julio

 


Bajo una persistente llovizna se realizó hoy, 27 de julio, con la solemnidad que corresponde, la bendición y colocación de la PIEDRA FUNDACIONAL de la iglesia Sagrada Familia que se comenzó a construir en la ciudad de Yerba Buena, Tucumán, Argentina.

El solemne acto fue llevado a cabo por S.E. Monseñor Julián Espina Leupold y las piedras que se colocaron fueron traídas de dos lugares diferente que representan a los miembros de la comunidad. Del sur de la Argentina, donde vivieron muchos años la Familia de los Obispos, Monseñor Pio Espina Leupold recogió personalmente las piedras en “Monte Grande” de las “Choique Mahuida” (Ñandú de las Colinas, en idioma de los pueblos originarios de esas tierras). Asimismo, se trajeron piedras del lecho del rio que cruza la importante ciudad de Lules, en Tucumán. De esta forma quedó unida la comunidad en los basamentos de la futura Iglesia.

Cabe destacar que las oraciones y letanías de los santos, propias de la ceremonia, fueron acompañadas por un número importante de feligreses que quiso estar presente, a pesar de la contrariedad climática, destacando la fe de estos.

Es importante señalar que Tucumán, en los grandes tiempos de apostasía preclara, donde el remanente fiel a la Verdad es reducido, tiene la enorme Gracia de contar con dos capillas donde, cada domingo, se dicen 2 misas. La Capilla de San Miguel Arcángel tiene un sacerdote que vive en la ciudad de San Miguel de Tucumán, y la Capilla Sagrada Familia, tiene la visita regular de los sacerdotes y Obispos de El Retiro Mater Dei, de la provincia de Córdoba.

Con este acto se dio comienzo a la obra y se espera poder inaugurar la Iglesia para la próxima Semana Santa de 2026.



La Cruz que precidió la vigilia  


                                                     Las piedras colocadas en el basamento









Video de Bendicion AQUI 
Video de Letanias de los Santos AQUI 

 

Milagro de la sangre de San Pantaleón en el Monasterio de la Encarnación, Madrid (España)

 


Cada 27 de julio Madrid revela un milagro. Este asombroso hecho ocurre en el Real Monasterio de la Encarnación, que lo alberga desde hace alrededor de 400 años. Los fieles que se acercaron al templo madrileño pudieron ver licuarse una pequeña muestra de sangre de hace siglos. 

Los días 26 y 27 de julio la Iglesia de la Encarnación muestra la reliquia de la sangre de San Pantaleón. Y como es habitual, surge la incógnita: ¿se licuará este año?. Ya que es un hecho que viene sucediendo desde el siglo XVII, de forma inexplicable, año tras año.

Sobre el altar mayor se ubica el relicario que contiene en una ampolla la reliquia del santo, que durante su festividad sufre una transformación inexplicable: La licuefacción. La sangre del santo, que durante todo el año está en estado sólido y color parduzco, empieza a convertirse, poco a poco, en un líquido de una tonalidad brillante.

San Pantaleón Fue un médico de la nobleza hacía el siglo IV D.C. Vivió en la región turca de Esmirna y su vida cambia radicalmente al convertirse al cristianismo. Las actas de su martirio nos relatan hechos milagrosos: Trataron de matarlo de seis maneras diferentes; con fuego, con plomo fundido, ahogándole, tirándole a las fieras, torturándole en la rueda y atravesándole una espada. Con la ayuda del Señor, Pantaleón salió ileso. Luego permitió libremente que lo decapitaran y de sus venas salió leche en vez de sangre y el árbol de olivo donde ocurrió el hecho floreció al instante. Podría ser que estos relatos son una forma simbólica de exaltar la virtud de los mártires, pero en todo caso, lo importante es que Pantaleón derramó su sangre por Cristo y los cristianos lo tomaron como ejemplo de santidad. Todo esto ocurrió hacia el año 305.

Según la tradición cristiana, varios fueron los fieles que recogieron su sangre con pequeños algodones y la fueron guardando en ampollas de cristal que se fueron repartiendo por toda Italia y otros países para su culto.

En el siglo XVII en España, la hija del virrey Juan de Zúñiga, que posteriormente sería la fundadora del Real Monasterio de la Encarnación, llevó la reliquia a España. Los milagros relacionados con la sangre y sus cambios de estado de sólido a líquido llevaron a la iglesia a intervenir para saber cuál era el origen de estos milagros o si, simplemente eran hechos inventados.

El 28 de enero de 1724, el arzobispo de Santiago de Compostela y juez ordinario inquisidor, comenzó el juicio a la Sangre. Tras la declaración de varios testigos ilustres de la época, que acudieron cada 27 de julio durante 7 años consecutivos, para verificar la licuefacción, el milagro se dio por verídico.

Así consta en un manuscrito en el Convento de la Encarnación, datado el 30 de agosto de 1729. El manuscrito dice así: “Su señoría, señor juez, declara y confiesa haberla visto líquida y fluida dicho día de San Pantaleón, veintisiete de julio, y después de su festividad condensada y dura, todas repetidas veces en el tiempo de diez años. Y conformándose con el parecer de los expresados teólogos, canonistas y médicos, lo tienen y veneran por prodigio y maravilla, alabando a Dios Nuestro Señor por las obras sus santos”.

Actualmente existen dos ampollas con la sangre de san Pantaleón: la del Real Monasterio de la Encarnación, de las agustinas recoletas, y otra que se conserva Ravello, Italia. A pesar de su distancia geográfica, ambas atraviesan el mismo proceso cada año a la misma hora. 


Monasterio de la Encarnación


Reliquia con la sangre de San Pantaleón


sábado, julio 26, 2025

Devoción de los 7 dolores de la Santísima Virgen (con imágenes)

 


En 1862, el papa Pio IX bendijo las revelaciones de Jesús a santa Brígida, y el año siguiente, El Gran congreso de Malines las recomendó.

Las devociones aprobadas son:

·       Las 15 oraciones. Un año de meditaciones diaria sobre la pasión y muerte de NSJC

·      Las 7 oraciones. 12 años de meditación diaria por la sangre derramada por NSJC en su vida

·      Los Dolores de Maria. Meditación sobre los 7 dolores más profundos de la Santísima Virgen.

La devoción de los 7 dolores de Maria tiene innumerables gracias (como cada devoción de Santa Brígida) y se conocen muchos testimonios que dan fe de esto.

Desde mi humilde punto de vista, para iniciar una de las oraciones recibidas por revelacion Santa Brígida, la más fácil es la de los dolores de Maria, ya que no tiene un tiempo estipulado y se puede hacer en familia o en grupo/s de oración.

En otras entradas pondremos las oraciones de la devoción del año y la de los 12 años (como se conocen vulgarmente las mismas)


Madre afligida, por el dolor que padeciste al oír de los labios del Santo Profeta Simeón, que una espada de dolor había de atravesar tu alma, no permitas que yo, con nuevos pecados atraviese tu alma tan dolorida. Ave María.



Virgen angustiada, por los trabajos que padeciste huyendo con tu Hijo Jesús a Egipto, no consientas que yo destierre de mi alma por el pecado a Cristo. Ave María.



Madre desolada, por las amargas penas que sufriste en la pérdida de vuestro Hijo dulcísimo, haz que si le perdiera por mis pecados, no descanse hasta hallarle de nuevo por medio de una sincera confesión. Ave María.



Madre de atribulada, por el dolor que sentiste viendo a tu querido Hijo con la Cruz a cuestas en la calle de la amargura, no permitas que yo, con nuevas ofensas, aumente el peso de aquella Cruz y lastime más tu corazón maternal. Ave María.


Reina de los mártires, por tus Dolores con los que fue crucificada tu alma, cuando contemplabas a tu Divino Hijo clavado en la Cruz, haz que mortifique yo mis malas pasiones y viva crucificado con Cristo. Ave María.



Madre dolorosa, por las lágrimas que tú mezclaste con la sangre de tu Hijo cuando le tenías muerto en tus brazos, alcánzame luz del cielo para conocer la gravedad del pecado, que fue la causa de Su muerte y de tu dolor. Ave María. 



Virgen Santísima, por la soledad en que quedaste dejando el cadáver de tu Hijo en el sepulcro, alcánzame la gracia de llevar con cristiana resignación, las penas que por mis culpas he merecido, esperando que se han de cambiar pronto en las alegrías de la gloria. Ave María.


Oración final

Madre mía dolorosísima. Ya que en la persona de San Juan los engendra, nos engendraste al pie de la Cruz con tan acerbos Dolores. Muéstrame que eres mi amorosa madre y alcánzame la gracia que te pido en esta corona dolorosa, la perseverancia en el amor y servicio de tu divino hijo Jesús, para tener la dicha de alabarle eternamente en el Reino de su gloria. Amén.

 




 


jueves, julio 24, 2025

Ana Catalina, un milagro del pozo de San Francisco, Tucumán (Argentina)



Hace un mes, mas o menos, estaba pensando en hacer el relato del milagro que hizo San Francisco Solano en nuestras tierras. Caminando, conversando y contando a lo que me dedico, salió la historia del pozo de pescados, como se lo conoce en la zona de Trancas, Tucuman.

Miriam Ale, es la mama de Ana Catalina Pérez Arias y no dudó en compartir su experiencia de fe y esperanza. Una experiencia que puede alentar a muchos a seguirla y confiar, no en el pozo en sí, sino en la intercesión de los Santos, teniendo a Dios como el obrador de esos milagros. Les dejo el relato escrito y el enlace del audio de Miriam para que sientan la emoción del MILAGRO DE SU VIDA.

 

Ana Catalina es la menor de 3 hermanos, la única nena. Una bebé muy esperada que llegó para completar nuestra familia y llenarla de juegos y sueños rosas. El 23 de marzo del 2023 parecía todo normal. Hacía poco tiempo había comenzado las clases y era su primer grado. Su papá, Nicolás, paso a retirarla por el Colegio en moto y en la espera del cambio de semáforo, ella le dice que no puede ver nada, que tenía los ojos abiertos, pero no veía, que se sentía mal. Pasamos de médico en médico y por muchos y varios estudios. Y nos dieron distintos diagnósticos, todo en base a lo que ella relataba hasta que estuvieran los resultados de los estudios.

Llegó el primer informe, micros infartos y una mancha en la parte izquierda del cerebro sin nada por hacer, según los médicos, nos dijeron que esto se podía repetir y que ella había tenido un ACV (NR: Accidente Cerebro Vascular), pero no había nada que podíamos hacer para prevenir y evitar que pase nuevamente. En nuestra desesperación pusimos toda la fe en Dios y por una amiga llegamos al pozo de San Francisco. Y ella, ella nos había contado que era muy milagrosa.

Llegamos y el lugar es mágico. Transmite paz y tranquilidad. Nos dijeron que debíamos pedir 3 deseos y tocar la campana. Nuestro deseo y súplica más importante fue; que no se vuelva a repetir y que ella pueda tener una vida feliz y sana.

Los controles médicos que vinieron después, todos salieron bien. Nosotros no fuimos buscando una cura a una enfermedad que ya había pasado y la mancha del cerebro estaba ahí. Fuimos buscando el milagro de que no vuelva a repetirse. Y así fue. El pozo de San Francisco Solano hizo el milagro en nuestra pequeña.

Escuchar el relato Aquí 



Los tesoros que guarda Miriam de su primera visita  al Pozo de San Francisco como testimonio de su Fe






San Francisco Solano y el pozo milagroso de Tucumán (Argentina), 24 de Julio


San Francisco Solano, nació en la ciudad de Montilla, España, de familia no menos esclarecida por su nobleza que por su piedad.

Desde niño dio muestras de aquellas virtudes que habían de florecer más tarde en el hombre y se asegura que conservó intacta hasta su muerte la inocencia bautismal. Llegado a la adolescencia pidió y obtuvo ser admitido en la Orden del Seráfico Padre San Francisco, donde se distinguió por su humildad y por el rigor de sus austeridades.

Solicitó a los superiores ser enviado a las misiones del África donde deseaba extender el reino de Cristo y derramar por él su sangre. Pero Dios que le tenía destinado a otras conquistas, le deparó las misiones del nuevo mundo. Fue en “el Tucumán” (así se le llamaba, durante la colonia a una vasta zona del centro y norte de Argentina y parte del sur de Bolivia, sirviendo como nexo entre Potosí y Buenos Aires) el primer campo de sus tareas apostólicas.

Es, en lo que hoy se llama provincia de Tucumán, en una ciudad al norte de la misma,  llamada Trancas, en donde se obró un gran milagro de San francisco Solano, que perdura hasta la actualidad.

Estando el santo, en la zona especificada, en ese momento de su apostolado en América, en que la región sufría una sequía severa que estaba devastando los cultivos y la vida animal. Los naturales de la zona, desesperados, acudieron a San Francisco en busca de ayuda. Según la historia, el santo respondió en el idioma de los nativos y golpeó el suelo con su bastón mientras rezaba a Dios. De repente, brotó agua cristalina de la tierra y se formó un pequeño lago donde comenzaron a saltar peces. Este milagro fue una verdadera muestra del poder Divino y dejó una profunda impresión en la comunidad local.

El “Pozo de Pescado” es un testimonio de la fe y el poder de Dios. Se conserva en el lugar, aquella vertiente de agua, donde muchos creyentes aún pueden visitar y hasta la fecha, se siguen obrando milagros.






 

 

miércoles, julio 23, 2025

Las devociones católicas y su eficacia en el camino espiritual




Las devociones son manifestaciones de nuestro profundo amor a Dios, enraizadas en el culto y servicio a Su Santo Nombre.

Como católicos, es precisamente el estar dispuestos a honrar y dar gloria a Dios, ya sea en oración pública o privada, o al realizar algún acto de acuerdo con Su voluntad, lo que ejercitará nuestra propia espiritualidad.

A través de la oración, nuestras devociones reafirman nuestro compromiso total con nuestro Señor Jesucristo. Y a cambio, obtendremos favores que sólo Él puede brindar a través de Su infinita Misericordia y Sus Bendiciones.

Nuestra vasta selección de devociones católicas (oraciones, novenas, letanías y meditaciones) está diseñada para ayudarnos a crecer en la Fe y Amor a Dios.

Hay muchas devociones que pueden ayudarnos a elevar nuestro espíritu a Dios. Tendremos santos de nuestra mayor cercanía y algunos que Dios nos lo presentará para caminar por donde Él quiere que lo hagamos, ayudados de poderosos intercesores.

Aunque nuestra santa fe nos enseña que nuestro Señor Jesucristo es necesariamente nuestro abogado y medianero para con su Eterno Padre (I Juan II, 1), y que su Majestad nos mereció la gracia para nuestra justificación, santificación y salvación, de tal suerte que sin Él nos es imposible todo esto y no por eso son inútiles los ruegos de los Santos, ni se nos prohíbe el valernos de su intercesión, ni se le hace con ello agravio a nuestro amabilísimo Redentor (Concilio de Trento, sesión XXV, Decreto sobre la Invocación y religión de los Santos), antes bien cede en honor suyo el ser conocido y predicado en sus Santos admirable. (Esto lo tratamos en “Las excelencias de Sta. María Magdalena y conviene recordarlo)


Es de gran refrigerio a las almas del Purgatorio el santo Sacrificio de la Misa

 


Extracto del Libro “Las Maravillas de Dios con las Almas del purgatorio” (Carlos Rosignoli, 1945)

Misit offerri pro peccatis mortuorum sacrificium (II MACHAB., XII)

Definió el santo Concilio de Trento, que entre todos los sufragios que se ofrecen por las almas del Purgatorio, ninguno les es de mayor provecho que el santo Sacrificio de la Misa. Animas in Purgatorio detentas, potissimum accep-tabili altaris Sacrificio juvari (Ses. 25, Decret. de Purgatorio).

San Gregorio en sus Diálogos refiere varias apariciones de almas para pedir sufragios, y principalmente los del incruento Sacrificio. Pero referiré un caso admirable que se lee en la vida del santo Obispo Teobaldo.

Ciertos pescadores que en el otoño se ocupaban en su oficio, al sentir un peso más que de ordinario en la red la tiraban a tierra, contentos con la esperanza de haber hecho una buena presa; pero se hallaron burlados al ver que en lugar de pescado sólo había en la red una grande masa de hielo. La novedad entretanto (por ser tan ajeno de la estación), y la idea que les ocurrió de hacer con ella un regalo a su buen Obispo, les compensó en parte del chasco. Fué muy grato al Prelado el obsequio que se le hizo, porque padeciendo a la sazón de gota no podía ofrecérsele un remedio más oportuno para mitigar los vehementes dolores que padecía. Aplicó inmediatamente al hielo los pies inflamados por el ardor de la gota y experimentó gran refrigerio. Continuó repitiendo esta operación, experimentando siempre grande alivio, y sin que por esto el hielo, compacto como un bronce, destilase una sola gota. En una de estas veces y bien de mañana, oyó salir del hielo una voz como de quien sumamente afligido pedía misericordia y socorro.

Atónito el paciente Obispo con tal novedad, preguntó quién fuese y qué quería: “Soy un alma,” respondió, “condenada a pagar en el centro de este durísimo hielo las penas que merecen mis culpas”; lo que entendido por el santo Obispo, volvió a preguntar: “¿y con qué género de sufragios podremos aliviarte?” “Si por espacio de treinta días continuos”, dijo el alma, “se ofreciere por mí el santo Sacrificio de la Misa, al concluirse la última concluirán también mis acerbos dolores.”

Accedió Teobaldo a tan justa demanda y la puso en ejecución tan pronto como se lo permitieron sus fuerzas, pero no pudo verificarlo en la forma exigida por los estorbos que interpuso el enemigo de las almas. El primero fue que hallándose ya con la mitad de las Misas dichas sin interrupción, se vio obligado a suspender la prosecución por atender a la guerra civil que repentinamente se encendió entre los ciudadanos. Empezada segunda vez la tarea y cuando ya llevaba dichos dos tercios, se vio imposibilitado a continuar por una inesperada irrupción de enemigos que se presentaron ante los muros de la ciudad.

Emprendida, finalmente, la continuación por tercera vez, y cuando estaba ya preparado para salir al altar, le dieron la noticia de que estaba próximo a incendiarse el palacio episcopal a causa del fuego vehemente con que ardía la casa inmediata. El santo Obispo se detuvo un momento a reflexionar, y dirigiéndose al altar dijo: que arda enhorabuena el palacio, quiero concluir estas Misas, suceda lo que sucediere. ¡Santa resolución! Porque ella sola bastó para que desapareciera el fuego, que no tenía de tal sino la apariencia, pues lo había suscitado el enemigo para retardar con la conclusión de las Misas la libertad de aquella alma. El globo de hielo se derritió, y el alma libre se presentó gloriosa a dar afectuosísimas gracias a su libertador, cuya caridad la había sacado de la potestad del enemigo para volar al seno de su Criador.


martes, julio 22, 2025

Sta. Maria Magadalena, su muerte y sepultura, 22 de Julio


Según la tradición más común, María Magdalena y otros amigos de Jesús fueron en barco al sur de Francia y convirtieron toda la Provenza. Este relato sostiene que se retiró a una colina o cueva, La Sainte-Baume, donde vivió una vida de gran penitencia durante treinta años y luego murió.

En la persecución que se levantó después de la muerte de san Esteban, María, Lázaro y Marta, con otros discípulos del Señor, fueron puestos en un navío sin velas ni remos, para que pereciesen en el mar. Mas apartando en Marsella, con el admirable ejemplo de su vida y palabras de cielo y milagros que hacían, convirtieron aquella provincia a la fe de Cristo, y se dice que san Lázaro fué obispo de Marsella, y la Magdalena, se retiró a una soledad donde pasó treinta años muy consolada del Señor, hasta que su alma bendita fue llevada al cielo por los santos ángeles.

Los restos de la santa se descubrieron 12 siglos después de su muerte. No sería hasta el 9 de septiembre de 1279, cuando el príncipe de Salerno, más tarde , Rey Carlos II de Nápoles, descubrió los restos mortales  de María Magdalena de forma oficial, en Saint-Maximin-la-Sainte-Baume, Provenza y es alli donde esta su tumba.

Reflexión: Es mucho para notar (como observa san Crisóstomo) que santa Magdalena fué la primera que vino al Señor para alcanzar el perdón de sus culpas, usando de todas las cosas que le habían sido instrumento de pecado, para hacer de ellas remedios contra el pecado; porque de los ojos con que cautivaba antes las almas hizo fuentes para lavar la suya; de los cabellos hizo lienzo para limpiarla; de la boca hizo portapaz para recibir la de Cristo; y del ungüento hizo medicina para curarse. Imitemos este ejemplo, y si de los dones que hemos recibido de Dios hemos hecho instrumentos para ofenderle, usemos ahora de ellos para servirle y amarle.

Oración: Suplicámoste, Señor, que seamos ayudados por la intercesión de la bienaventurada María Magdalena, a cuyos ruegos resucitaste a su hermano Lázaro, de cuatro días muerto. Tú que vives y reinas por todos los siglos de los siglos. Amén.


 


 

Las excelencias de Sta. María Magdalena (Tercera parte), 22 de julio




La séptima excelencia de Santa María Magdalena es haber sido una de las almas más amadas de nuestro Señor Jesucristo y de su Santísima Madre. Se trata de la fidelidad con que imitó y siguió al Señor.

Considera esta especial excelencia de la felicísima Magdalena en haber sido la predilecta discípula, y una de las almas más amadas y favorecidas de Cristo nuestro Señor, y de su bendita Madre. Considera igualmente la fidelidad con que los imitó y siguió, y la obligación que tienes de imitar a nuestro Señor Jesucristo para poder salvarte.

Fue predilecta discipula de nuestro Señor Jesucristo haciéndole múltiples favores, siendo entre ellos muy notable, haber sido la primera a quien apareció resucitado antes que a alguno otro de sus apóstoles y discípulos, y a quien encargó que les diese la noticia de su gloriosa resurrección. Fueron innumerables y particularísimos los que le hizo en el resto de su vida, y especialmente los treinta años que permaneció sola en el desierto: tres Santos, dijo el Señor a Santa Brígida, fueron los que sobre todos los demás me complacieron: mi Santísima Madre, el Bautista y la Magdalena (Revelaciones, Libro 4, cap. CVIII)

Desprendida de todo lo terreno, y vencidas cuantas dificultades se le propusieron para impedir o retardar su resolución, tomó con más qué humano consejo la de seguir personalmente a nuestro Señor Jesucristo, y acompañarle en sus viajes y en sus apostólicas expediciones con fidelidad y constancia. Seguíale pues a todas partes por los campos, villas, aldeas, a los desiertos y a las ciudades. Seguíale siempre a pie, y en los mismos términos que hacía el Señor sus jornadas con sus apóstoles y seguíale no solo entre las gentes y los poblados donde era bien recibido y oída con aprecio su doctrina, mas también cuando y donde era perseguido y menospreciado por la impiedad y obstinación de los que le escuchaban. Betania, Jerusalén y el Calvario prueban hasta el convencimiento esta verdad.

La octava excelencia de Santa María Magdalena es haberla escogido el Señor para modelo y ejemplar de la vida contemplativa: se propone su ardentísimo amor a nuestro Señor Jesucristo.

Considera la rara excelencia de esta favorecida sierva y esposa del Señor en haberla escogido entre todos sus Santos para que fuese en su Iglesia ejemplar vivo y practico de la mejor y óptima parte de las dos que dejaba en ella establecidas para la santificación de sus hijos. Considera asimismo su inflamado amor a nuestro Señor Jesucristo, y la indispensable necesidad que tienes de este amor para poder salvarte.

Considera, pues, que habiendo establecido nuestro Señor Jesucristo en su Santa Iglesia las dos clases de vida, activa y contemplativa, en que dejaba dispuesto que respectivamente pudiésemos salvarnos y santificarnos sus hijos, y llegar a la misma unión con su Majestad en el estado de viadores, quiso también y dispuso con su infinita sabiduría que su predilecta Magdalena nos sirviese de ejemplo y modelo para ello.

La novena excelencia de Santa María Magdalena es haberla constituido el Señor abogada de los pecadores para su conversión, y protectora de los justos para llegar a la contemplación y unión con Dios. Se plantea aquí, su heroica caridad.

Considera, pues, que aunque nuestra santa fe nos enseña que nuestro Señor Jesucristo es necesariamente nuestro abogado y medianero para con su Eterno Padre (I Juan II, 1), y que su Majestad nos mereció la gracia para nuestra justificación, santificación y salvación, de tal suerte que sin Él nos es imposible todo esto y no por eso son inútiles los ruegos de los Santos, ni se nos prohíbe el valernos de su intercesión, ni se le hace con ello agravio a nuestro amabilísimo Redentor (Concilio de Trento, sesión XXV, Decreto sobre la Invocación y religión de los Santos), antes bien cede en honor suyo el ser conocido y predicado en sus Santos admirable. Los Santos no solo son nuestros modelos y ejemplos para que aprendamos de ellos la virtud: son además nuestros protectores para favorecernos y alcanzarnos de Dios con sus ruegos el remedio de nuestras necesidades, y para esto nos lo pone a la pública veneración la Santa Madre Iglesia: por ellos nos dispensa el Señor sus beneficios, y parece haber destinado particularmente a algunos para por su medio concedernos alguna gracia especial, espiritual o temporal. Entre estos ha señalado a la Santísima Magdalena, para que al mismo tiempo que nos dio en su conversión y penitencia un ejemplo extraordinario y admirable, sea también poderosa para conseguir de la divina piedad un bien semejante a los pecadores, de modo que detestando estos su mala vida, se conviertan a verdadera penitencia y consigan su infinita misericordia (San Bernardino de Siena, citado por el P. Isidoro de Sevilla en la Vida de Santa María Magdalena)




Las excelencias de Sta. María Magdalena (segunda parte), 22 de Julio

 


La quinta excelencia de Santa María Magdalena fue haber sido terrible y formidable para Lucifer su virtud, y aun su presencia: trátase de su invencible fortaleza.

Considera que, desde el principio de su conversión, pero mucho más después, así como fue festiva para el Cielo su mudanza y su virtud, así fue para el Infierno terrible y espantable. No es decible cuánto celebraron los Ángeles en el Cielo la penitencia y la mudanza de vida de Magdalena: lo que se regocijaron con sus grandes progresos en el camino de la perfección, y lo que con ella se familiarizaron en el tiempo de su vida, particularmente mientras que permaneció hasta su muerte en el desierto. A la verdad, su vida, su amor a Dios, su contemplación, su íntima unión con el Señor, y los señaladísimos favores que de Él continuamente recibía, la sublimaron a tan alta perfección, que más parecía un Ángel en carne que mortal y humana criatura; no se ocultaba a Lucifer lo precioso de este tesoro al mundo desconocido por entonces; vio su portentosa y verdadera conversión, y rabioso por lo que con ella había perdido se enfureció extraordinariamente, hasta intentar el acabar con su vida si pudiese. Quiso retardar e impedir sus resoluciones, y nada omitió su diabólica astucia por retraerla de su intento; armóle lazos, opúsole mil escollos, y batió su corazón con las más recias sugestiones, pero superior a todo el ferviente generoso espíritu de nuestra Santa, no solo le venció completamente, mas también lo confundió con sus fervores de tal modo que le era después intolerable su presencia. «Cuando se convirtió Magdalena (dijo el Señor a Santa Brígida de Suecia) confusos los demonios exclamaron: “Gran presa habernos perdido, ¿cómo la podremos reducir otra vez a nuestro poder y esclavitud? Ella se lava con tantas lágrimas, que no tenemos valor para mirarla. Ella se cubre con tantas y tan buenas obras, que no deja ver en sí la menor mancha, y ella es tan encendida en el amor y servicio de Dios, y tan activa y ferviente en el cuidado de su santificación, que nos debilita las fuerzas, y no podemos ni nos atrevemos a estar cerca de ella”» (San Agustín, en las Revelaciones de Santa Brígida, libro 4º, cap. CVIII, n. 2),

La sexta excelencia de Santa María Magdalena es haber resucitado el Señor a Lázaro, su hermano, por sus ruegos. Se propone su ferviente y devotísima oración.

Considera que, entre las más señaladas excelencias con que engrandeció el Señor a su escogida y amada Magdalena, una fue la de haber resucitado movido de sus ruegos a su difunto hermano Lázaro: considera también su devota y continua oración, y cuánto necesitas de esta virtud para poder salvarte.

Amaba mucho el Señor a estos tres santos hermanos, y habiendo enfermado de muerte aquél, avisaron a Jesús y suplicáronle que viniese a darle la salud. Retardó su Majestad el hacer lo que entonces le pedían, para concederles después mucho más de lo que le rogaban, como en efecto lo hizo dando la vida a Lázaro, de cuatro días difunto, fétido ya, y en estado de corrupción su cuerpo. La Santa Iglesia vive persuadida que por los ruegos de Magdalena, resucitó Cristo nuestro Señor a Lázaro, y deduciendo de aquí lo mucho que valen en su divina presencia las súplicas de esta su predilecta, no duda pedirle que se digne por ellas favorecerla. Así se nos convence del gran dogma de la utilidad e importancia de los ruegos de los Santos, y así se nos evidencia una de las más memorables excelencias de la Santa Magdalena, y el gran mérito de su oración y de sus lágrimas para con el Señor.

Considera ahora cuán necesaria te es la oración, y sus circunstancias para no perder el fin último de tu salvación, para lo que fuiste creado. Es la oración uno de los actos más principales de la virtud santa de la religión; y de aquí es que tanto como esta nos obliga y nos es para salvarnos necesaria, tanto lo es y nos precisa la oración. La falta de oración puede apartarnos de Dios, privarnos de sus bienes y precipitarnos en muchos males; porque hay ciertas gracias sobrenaturales que comúnmente hablando no se nos dan sino por medio de la oración. Cuando tenga nuestra oración, humildad, fe, esperanza, entonces nos podemos prometer su fruto, ya que son las virtudes que deben acompañarla y las que principalmente se requieren para que ella sea agradable a Dios, y a nosotros meritoria.


Las excelencias de Sta. María Magdalena (primera parte), 22 de Julio

 


La primera excelencia de Santa María Magdalena es haber sido la primera que buscó a nuestro Señor Jesucristo para el remedio de su alma.

Fue la primera entre todos los que oyeron y vieron a nuestro Señor Jesucristo que le buscó arrepentida de sus culpas, y con el fin de que se las perdonase. Fue muy rara esta mudanza, y muy notable, así por las circunstancias de la persona, que era de la mayor distinción y de relajada conducta, como por haber sido la primera que con este motivo buscó y se arrojó a los pies de nuestro Señor Jesucristo. Los demás le habían buscado, y le buscaban por entonces, con solo el fin de que los sanase en sus enfermedades corporales, les diese la vista, el habla, o el oído de que carecían, o los remediase en alguna necesidad temporal en que se hallaban.

Fue esta conversión, una de las más perfectas que se han visto y de que se hace mención en las Santas Escrituras. Nada le faltó de cuanto para serlo es necesario, porque se volvió a Dios con todos los fervores de su alma y se apartó enteramente de cuanto pudiera ser ofensa Suya.

Considera ahora, volviendo ya sobre ti la reflexión, cuán necesario te es imitar en cuanto puedas este ejemplo para poder salvarte.

La segunda excelencia de Santa María Magdalena fue haber sido perdonada en su conversión a culpa y pena. Se presenta su heroica admirable penitencia.

Considera, alma, la grande excelencia de esta amada Sierva del Señor en haber sido perdonada plenamente en su conversión de culpa y de pena: lo heroico y singular de su penitencia; y la necesidad que tienes de hacerla de las tuyas, para que Dios te salve y te perdone. Siendo una de los primeros que en la ley de gracia han obtenido de Dios tan señalado favor y tan raro beneficio. Su contrición perfectísima causada de su intenso y ardiente amor al Señor la dispuso y la proporcionó para tanta felicidad.

 

La tercera excelencia de Santa María Magdalena fue haberle concedido el Señor en su conversión diferentes gracias, dones y virtudes singulares.

Se trata de su fe heroica y singular. Considera, la recomendable excelencia de esta amada discípula del Redentor en las diferentes gracias y dones sobrenaturales con que enriqueció y hermoseó esta su bendita alma desde su maravillosa conversión: y cuán sublime fue con que mereció, y se dispuso para recibirlas, como también que esta es una virtud precisa con necesidad de medio para salvarnos. Destruyó en su alma la inclinación y propensión de todos los vicios capitales de soberbia, lujuria, ira, gula, y los demás. Le comunicó el singularísimo privilegio de ser preservada para siempre de toda tentación o sugestión torpe, impura y deshonesta: le infundió los hábitos de las virtudes teologales y morales en grado muy perfecto y levantado. Le dio una castidad angelical y limpísima, en la que se aventajó mucho a las Vírgenes más puras, una humildad profundísima y de corazón, una heroica y rigidísima penitencia, con las demás virtudes, con cuya penitencia había después de santificarse. Y le dio un odio santo al mundo y sus vanas felicidades, con un perfectísimo desprecio de todas ellas; un eficaz y verdadero deseo de los bienes del Cielo; y sobre todo un ardentísimo e intensísimo amor al mismo Señor que la espiritualizó, y como que la unió y transformó toda en Él.

La cuarta excelencia de Santa María Magdalena es haber sido defendida y alabada hasta tres veces su conducta por nuestro Señor Jesucristo. Se formula su profundísima humildad.

la humildad de la Santa Magdalena desde el principio de la vida espiritual en su conversión hasta el fin de ella en el desierto, donde murió. Aquel postrarse a los pies de su amabilísimo Redentor, llegándose no por delante, sí por detrás, como confesándose indigna de su presencia: aquel practicar los actos más humildes en presencia de los convidados, no ignorando que había de ser por ellos vilipendiada y criticada, ¿qué indica sino unos sentimientos los más propios de una profunda humildad?

Aplaudida y festejada de los Ángeles del Cielo, enriquecida y adornada de dones, de gracias y de virtudes por el Espíritu Santo, y amada, favorecida y regalada extraordinariamente en lo interior y exterior por nuestro Señor Jesucristo, jamás se apartó un punto la humildad de su corazón. Antes bien, tanto más se acrecentaba y perfeccionaba en ella, cuanto crecían y se multiplicaban los beneficios del Señor.

 





lunes, julio 21, 2025

Maria Magdalena, diste Gloria al Señor, confusión al infierno y júbilo al cielo


La bienaventurada María Magdalena, espejo de penitencia y fervorosísima discípula de Cristo, era hermana de san Lázaro y de santa Marta. Usando mal de la libertad que tenía por haber muertos sus padres, y viéndose noble, rica y hermosa, comenzó a darse a los gustos y deleites del mundo, de manera que tenía a toda la ciudad, en tanto grado, que la llamaban la pecadora. Dice el Evangelio que el Señor echó de ella siete demonios, por los cuales entienden algunos santos, los pecados y vicios de que el Salvador la libró.

La vida de la la discípula amada del Señor es tan rica en enseñanzas para profundizar, que no se puede compilar en una sola entrada de este blog. Por lo mismo, lo haremos en varias partes para que se pueda meditar en la vida de esta santa, cuyo amor a Jesús, la llevaron a seguirlo en cada prédica, convertirse plenamente a Él y le fueron perdonados no sólo los pecados, sino también las culpas.

La vida de “la de Magdala” nos tiene que llenar de esperanzas para confiar en el perdón de tantísimos pecados que acarreamos. Sabiendo que, si amamos de todo corazón a Jesús, teniendo un sincero arrepentimiento y “viviendo el resto de nuestras vidas en el desierto”, alejados del mundo (aun viviendo en él), podremos estar en el libro de la vida.

 

Entrada destacada

Memorare / Acordaos

  M emorare, O piissima Virgo María , non esse auditum a sæculo, quemquam ad tua currentem præsidia, tua implorantem auxilia, tua petentem s...